lunes, 27 de junio de 2011

El Periodismo que Comunica

En ocasión de conmemorarse hoy en Venezuela  la primera edición del CORREO DEL ORINOCO, periódico vocero del proceso independentista de nuestro país y que celebra el DÍA NACIONAL DEL PERIODISTA, quiero compartir las reflexiones de un artículo que publiqué el 6 de Julio de 1996, en La Región, cuando fui columnista de ese medio de comunicación, dada la vigencia de sus contenidos.

PERIODISMO QUE COMUNICA 
Creo en el periodismo que comunica la trascedencia humana, que no se limita a la reseña y crónicas de hechos y sucesos; si bien son la base de la técnica periodística y de nuestro ejercicio diario, NO ES LO ÚNICO NI LO MÁS IMPORTANTE DE NUESTRA PROFESIÓN.

Al recordar la hermosa homilía que nos ofreció Monseño Mario Moronta, el pasado 27 de Junio Día Nacional del Periodismo, me viene el mensaje "Decir la VERDAD no es ir contra los  VALORES", con el que el sacerdote nos invita a reflexionar. Los periodistas estamos llamados a trascender el diarismo para ser comunicadores sociales, a tejer puentes y no a destruirlos, a dejar el reporterismo cínico y simple para aceptar el reto de seguir creciendo, respetando a los demás,  asumiendo la denuncia con responsabilidad para que realmente sea legítima.

Somos responsables directos de lo que decimos, y con ello de lo que hacemos en el ejercicio diario. Grave papel el que se nos dio. Tenemos el poder de la palabra para FORMAR informando, para CREAR CONCIENCIA con la noticia, para ser críticos sin atropellar ni vender nuestra ética y principios rectores (por miedo o comodidad), para ser mensajeros sin abusar de privilegios que no poseemos.

Una psicóloga amiga me decía, para expresar su gusto por mi periodismo, que "le pones poesía a la realidad". Y desde entonces, sus palabras sembraron en mi un permanente alerta, a objeto de no caer en narcisimos y sobaditas al "ego", al mismo tiempo de fortalecer esa ganancia positiva de su reconocimiento, para seguir escribiendo con la amplia capacidad de asimilar también la crítica.

La comunicación, como ejercicio profesional,  ES EL SACERDOCIO DEL MENSAJE. Lo contrario es el chisme banal, es palangre falaz, servilismo, utilitarismo, críticas destructivas que encuentran en el periodismo ruido, propaganda y publicidad.

No somos dueños infalibles de la VERDAD,  ni hérores sacados de los cómics. Al contrario, estamos hechos de carne y hueso, sentimos;  también nos afectan los hechos que nos toca cubrir o reseñar. Estamos  llamados a no olvidar nuestro rol que, más allá de decir las cosas es el DECIRLAS CON ÉTICA Y RESPONSABILIDAD, para que el lector asuma el compromiso de PENSAR y ser más crítico frente a la realidad creada, así como el periodista a ejercer la profesión con un sentido de APOSTOLADO SOCIAL.

El día que el periodismo comunique más allá de la noticia y el tecnicismo, el mundo será otro y la humanidad habrá trascendido el amarillismo, el clientelismo al que muchos colegas se someten, el sensacionalismo y la trivialidad. 


HOY 27 DE JUNIO DEL 2011, A 15 AÑOS DE HACER ESTE ESCRITO, AÑADO:  

EL DÍA QUE EL PERIODISMO COMUNIQUE LA VERDAD, SIN QUE LOS PERIODISTAS TENGAN QUE TORCELA POR MIEDO A LAS CONSECUENCIAS DE DEFENDERLA, ESE DÍA NACERÁ LA VERDADERA LIBERTAD,  nuestro ejercicio dejará de estar peligrosamente amenazado y agredido.

Mis respetos a quienes defienden nuestra innata condición de AGENTES LIBRES (sea cual sea el lugar donde nos desempeñemos), a quienes luchamos con nosotros mismos para mantener nuestra ética como la brújula diaria de un ejercicio cada día más exigente.

SOMOS LIBRES CUANDO NO TENEMOS MIEDO A DEFENDER LA VERDAD,
 A BUSCARLA, A PRESENTARLA SIN MEDIATIZACIONES....

"LA VERDAD OS HARÁ LIBRES"
Jesús de Nazareth


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